Significado esotérico del Dios Thoth

Thoth es el Dios egipcio de la escritura, la magia, la sabiduría, el conocimiento y la luna. Se le describe como uno de los Dioses más sabios, profundos e importantes del panteón, además de ser el escriba, intérprete y consejero de los Dioses. También se le canalizó como el Dios del equilibrio cósmico, y por ende, se le asociaba estrechamente al principio de "ma'at".

A Thoth se le atribuyó la creación de una serie de ramas del conocimiento (derecho, magia, filosofía, religión, ciencia, escritura y el calendario de 365 días), por lo que fue visto como un juez infalible capaz de tomar decisiones completamente justas. 

La adoración de Thoth comenzó en el Bajo Egipto muy probablemente en el Período Pre-Dinástico (6000-3150 a.n.e) y continuó durante el Período Ptolemaico (323-30 a.n.e), que es la última era dinástica de la historia egipcia, ya que posteriormente se le adoró bajo el nombre de Hermes. Esto convierte a Thoth en una de las deidades más antiguas de cualquier civilización y/o cultura. Su nombre fue tomado a menudo por los faraones de Egipto, como por ejemplo; "Tutmosis", que significa "Nacido de Thoth". 

Se lo representa más comúnmente como un hombre con la cabeza de un ibis o un babuino sentado, con o sin un disco lunar sobre su cabeza. Era sobretodo adorado por los escribas, quienes derramaban una gota de su tinta en su honor antes de comenzar a escribir sus obras.

Según las antiguas historias egipcias, Thoth nació "de los labios de Ra" al comienzo de la creación, y fue conocido como el "Dios sin madre". En otra versión, Thoth se creó a sí mismo al comienzo de los tiempos y, como un ibis, puso el huevo cósmico que dio origen a toda la creación.

Los griegos lo admiraban profundamente, incluso, le adjudicaron ser la fuente de toda creación, sabiduría y conocimiento, tanto en la Tierra como en los planos celestiales. Por ello se le adoró bajo el nombre griego de "Hermes", quien cumple sus mismas funciones, y posteriormente como "Mercurio" por los romanos. 

De hecho, fue en estas regiones y territorios en donde nacieron los cultos herméticos; que fueron importantes movimientos religiosos y filosóficos de carácter esotérico que afirmaban estudiar y recibir las enseñanzas de "Hermes Trismegisto", que significa, "Thoth el tres veces grande"; un antiguo y sabio profeta egipcio a quien vieron como una manifestación o reencarnación de Thoth en la Tierra.

Desde tiempos antiquísimos, la imagen de Thot ha estado relacionada al concepto de orden divino, justicia y sabiduría.

Originalmente los egipcios lo conocieron como "Djehuty" o "Dhwty", que significa "El que es como el Ibis". 

El ibis era un ave sagrada en el Antiguo Egipto, asociada con el misticismo y la sabiduría, incluso, estos animales eran momificados al morir. Hasta la fecha se han encontrado decenas de cementerios y catacumbas especialmente elaborados para albergar los cuerpos de estas aves. 

Thoth asume la forma de ibis porque, como él; el pájaro está conectado con la luna. El ibis tiene un pico que se asemeja a la luna creciente, y su andar sugiere el movimiento de la luna. Sus plumas blancas y negras alternadas recuerdan las fases de luz y oscuridad de la luna, sobretodo en los ibis machos. Además de ser un animal lunar, el ibis era bien conocido en la antigüedad por su higiene e inteligencia; a menudo detectaba cuando el agua estaba sucia, malsana o envenenada, por lo que se negaba a beber de ella, también mataba reptiles venenosos y otros animales que pudiesen ser una amenaza para el hombre. Como el Dios Thoth, el ibis era hostil a fuerzas peligrosas y un modelo de pureza y buen sentido; porque Thoth, además de ser el Dios de la luna, era el Dios de la sabiduría, quien mantenía el orden cósmico que impregna el mundo creado. 

Por ejemplo, en la siguiente imagen observamos una escultura egipcia hecha de bronce, madera y vidrio, la cual data aproximadamente del año 300 o 200 a.n.e. Aquí, se ha retratado al Señor Thoth en su forma de ibis junto a su esposa Maat: ambos sirven al Dios del Sol todopoderoso, proporcionando el orden natural que impregna y sostiene la creación. 

Y en este relieve que se encuentra en el trono de Ramsés II (1.279-1.213 a.n.e) podemos apreciar su forma antropomórfica, mitad humano y mitad ave, su representación más común:

Thoth también fue conocido como "Señor del Ma'at", "Señor de las Palabras Divinas", "Escriba de Ma'at en la Compañía de los Dioses", y famoso por sus epítetos de ser un juez justo, sabio e incorruptible. Otras derivaciones de su nombre son: Jehuti, Tahuti, Tehuti, Zehuti, Techu, Tetu y Khemenu. De hecho, este último nombre dio origen a una de las principales ciudades egipcias, y en donde se asentó un importante culto de devoción en su honor. Al igual que con otros Dioses, sus templos y santuarios habrían servido como un punto focal para la comunidad, así como un recurso de consejo, guía espiritual y ayuda general para obtener alimentos o atención médica, con sacerdotes escribas altamente educados. Su centro de culto en Khemenu fue extremadamente popular, incluso existían granjas y cementerios de ibis, y hasta la fecha se han encontrado millones de estos animales momificados en este territorio y en todo Egipto (sí, millones). Aquí se adjunta una fotografía de uno de ellos:

La veneración perdurable de Thoth también se reconoce a través de una cantidad de amuletos que se hicieron en su nombre, los cuales se han encontrado en diferentes períodos de tiempo a lo largo de la historia y no solamente en Egipto, como este relieve encontrado en Irán que data del año 600-500 a.n.e, y que lleva la frase: "Thoth es una protección sobre mí":

Con el paso del tiempo, más específicamente en el período helenístico, los griegos adoraron a Thoth bajo el nombre de "Hermes", a quien reconocieron como el Señor de la magia, la sabiduría, las ciencias, el ingenio, el comercio y la escritura, y, en consiguiente, Khemenu pasó a llamarse "Hermópolis", que justamente significa "Ciudad de Hermes", en griego. 

Como guardián de los registros de los Dioses, Thoth también llevaba cuenta de los días de los seres humanos. Se le ve en una serie de imágenes que llevan la cuenta de los días y los años en los que los escribas egipcios pudieron registrar la historia del país.

Thoth aparece regularmente al lado de Osiris y Anubis en el Salón de la Verdad del Libro de los Muertos, tomando el papel de escriba. Su rol era:

1. Tomar nota de la vida del alma difunta. 

2. Registrar el resultado del corazón con la pluma de la verdad.

3. Atestiguar el veredicto final del juicio.

... como se puede apreciar en el siguiente papiro:

Este papel le dio a Thoth una reputación de veracidad e integridad, incluso era un ejemplo de vida, ya que los egipcios decían que debíamos mantenernos en un camino "recto y verdadero, como Thoth".

• El significado oculto y esotérico del Mito de Osiris

Su hogar en el más allá, conocido como la Mansión de Thoth, proporcionó un lugar seguro para que las almas descansaran y recibieran hechizos mágicos para ayudarlas a combatir contra los demonios que les impedirían llegar al paraíso. Su magia también fue fundamental en la revitalización del alma que le devolvía la vida a los muertos en el inframundo. 

La asociación de la escritura con la magia y el conocimiento oculto dio lugar a la creencia de que Thoth había escrito tratados de magia basados ​​en todo lo que sabía sobre los cielos, la tierra y el más allá, y que estos libros estaban escondidos para que los encontraran los iniciados de generaciones posteriores, incluso se llegó a pensar que Thoth en realidad fue una figura histórica experta en ocultismo y esoterismo, y que debido a sus grandes conocimientos fue visto como un Dios. De hecho, el historiador y sacerdote egipcio, Manetón; llegó a afirmar que Thoth escribió 36.525 libros, lo que aumentó el misterio en cuanto a su imagen y obras. Con el paso de los siglos han surgido varios libros y tratados de temática esotérica que intentan transmitir el conocimiento de los cultos thotsianos y la enseñanza original de Thoth, los cuales se orientan principalmente al gnosticismo, alquimia, ocultismo, hermetismo y filosofía, como el "Kybalión" y las "Tablillas Esmeralda". Por ello también se pensó que Hermes Trismegisto fue en realidad era una encarnación del Dios Thoth, como una especie de avatar hindú. Incluso, el padre cristiano, Clemente de Alejandría, afirmó en su obra "Stromata" que existen al menos 42 libros egipcios sagrados escritos por Hermes. Estos libros contenían todo el conocimiento que necesitaba la humanidad, razón por la cual fueron resguardados con celo y sumo cuidado, de hecho, de aquí proviene la palabra "hermetismo" o "hermético", que significa "impenetrable", "secreto" o "cerrado". Aquí podemos ver uno de los tantos retratos medievales de Hermes Trismegisto:

Thoth también fue el responsable de fabricar uno de los amuletos más poderosos y sagrados del Antiguo Egipto: "El Ojo de Horus", también llamado "Udyat", luego de que el joven príncipe quedase ciego a manos de Seth tras un intenso combate por el trono de Osiris. Decir que Horus recibió el Udyat por parte de Thoth equivale a decir que se le revelaron todos los secretos y misterios del universo, puesto que el Udyat es una alegoría esotérica que los egipcios utilizaron para referirse a la Glándula Pineal o Sexto Chakra (tercer ojo); una pequeña estructura anatómica ubicada en la parte posterior del diencéfalo, la cual ha sido estudiada, adorada y respetada por prácticamente todas las culturas antiguas del planeta, al ser la puerta de acceso a planos superiores de conocimiento. La glándula pineal alberga el Chakra Ajna o Tercer Ojo, el cual se encarga de la percepción psíquica, de desarrollar el sentido de la intuición y de estimular las capacidades extrasensoriales, siendo de gran utilidad para experimentar viajes astrales y también para meditar, no por nada se le llamó "El ojo que todo lo ve". Es por ello el Uryat fue esencial para que Horus pudiese levantarse y vengar la muerte de su padre.

La continua fascinación por Thoth y su amplio conocimiento es un testimonio fehaciente de su perdurable popularidad y grandeza. Incluso hasta nuestros días su nombre es sinónimo de esoterismo y de conocimientos mistéricos, y es muy probable que cualquier estudioso de estos temas se haya topado con su nombre en reiteradas oportunidades. Como dato adicional, el  ocultista francés Jean-Baptiste Alliette "Etteilla" creó el primer mazo de Tarot moderno en su honor, llamándolo "El Libro de Thoth" (no confundir con el tratado de hermetismo), y la primera sociedad de cartomancia, la "Société littéraire des associés libres des interprètes du livre de Thot". Décadas más tarde, Aleister Crowley también crearía su propia baraja de Tarot y una serie de libros con el nombre de Thoth. 

Finalmente dejo una bella oración en su honor, datada del año 1.150 a.n.e durante el Nuevo Reino de Egipto (1.570-1.069 a.n.e):

"Ven a mí, Thoth, oh noble ibis. Oh Dios que se anhela en Khemenu, oh despachador y escriba de la Enéada, el grande de Unu. Ven a mí para que me des consejos y me hagas habilidoso en tu oficio. Mejor es tu profesión que todas las profesiones. Hace grandes a los hombres. El que es hábil en ella es apto para ejercer el cargo de magistrado. He visto muchos por los que has actuado y están en el consejo de los Treinta, siendo fuertes y poderosos por lo que has hecho. Tú eres quien ha dado consejos. Tú eres el que le ha dado consejos al huérfano. Shai y Renenutet están contigo. Venid a mí para que me aconsejes. Soy el sirviente de tu casa. Déjame contar tu destreza en cualquier tierra en la que me encuentre. Entonces la multitud de hombres dirá: 'Cuán grandes son las cosas que ha hecho Thoth'. Luego vendrán con sus hijos para marcarlos con tu profesión, una buena vocación al Señor de la Victoria. Gozoso es quien lo ha ejercido"

 Gloria a Thoth

• Adorar y rendirle tributo al Señor Thoth:

Como he dicho en múltiples ocasiones; a los Dioses no les interesan los bienes materiales ni tampoco la opulencia: ellos quedarán satisfechos con cualquier tipo de tributo, siempre y cuando sea entregado con humildad, respeto y amor. A los Dioses se les puede construir un pequeño altar para entregarles agua, frutas, incienso, hojas, etc., y como dije; siempre serán bien recibidas si las intenciones de la persona son sinceras. Sin embargo, también es cierto que existen algunos objetos que pueden funcionar de mejor manera para canalizar la energía de un Dios en particular. Es distinto un objeto de ofrenda que uno de invocación, aunque en el fondo ambos pueden complementarse entre sí y funcionar correctamente.

En el caso de Thot, sus objetos predilectos son:

- Artículos e instrumentos de escritura, como tinta, papel, lápices, bolígrafos, plumas, tinteros y similares. En la antigüedad, los escribas hacían una ofrenda a su patrón Thot vertiendo una pequeña cantidad de tinta en el suelo antes de comenzar el trabajo del día. También se le puede ofrecer libros de esoterismo, ocultismo, filosofía, leyes y de temática egipcia en general.

-Alimentos como: frambuesa, caramelo, damasco, melocotón, almendra, menta, té, café, chai, agua, chocolate amargo, cítricos, miel, higos (o higos bañados en miel), manzanas, uvas y pan. En el Antiguo Egipto, las ofrendas se consumían después de que la deidad en cuestión tenía su parte, similar a lo que ocurre en el hinduismo, ya que luego de ofrecerle los alimentos a los Dioses se transforman en "prasādam", que significa "comida bendecida".

- Piedras, gemas y cristales como la plata, la piedra de luna y el peridoto.

- Objetos y velas de color azul, verdoso, cerceta.

- Otros: Incienso (principalmente de los alimentos nombrados arriba), estatuillas o figuras de animales como el ibis, el halcón y el babuino. Objetos de plata. Estatuas o imágenes de pirámides, el Ojo de Horus, el Ankh, la luna, y de Dioses tales como Ra, Horus, Osiris, Isis, Maat, y por supuesto, de Él mismo.

Su adoración e invocación será ideal si usted está trabajando en algo que tenga que ver con la escritura, la literatura, las leyes o las comunicaciones. También es un patrón importante que lo ayudará y guiará en el estudio de diferentes ciencias místicas, como la brujería, la herbolaría, la alquimia, el ocultismo y las prácticas wicca. Ofrezca una oración y/o tributos a Thot para solicitar sabiduría e inspiración en cualquier ámbito de su vida. También es muy útil para intervenir disputas, conflictos y peleas, recordemos que Thoth siempre fue el mediador entre los Dioses, encargado de resolver y pacificar todo tipo de situación.