La energía negativa ejerce profundos efectos que pueden agotar la fuerza mental y física, y en consiguiente, causar una sensación general de desequilibrio, angustia, fatiga, nerviosismo y ansiedad. Sin embargo, existen métodos que podemos emplear para lograr un cambio positivo dentro de nosotros mismos y de nuestro entorno. Estos métodos se obtienen fácilmente, y se elaboran a partir de fuentes naturales y, mejor aún, son extremadamente fáciles de usar; los inciensos.
Históricamente, los inciensos se han utilizado desde hace milenios por las diversas culturas del mundo, producto de las increíbles propiedades y beneficios que otorgan los ingredientes de su composición. Al quemarse, los inciensos van desprendiendo una fragancia aromática que incluye un principio activo capaz de estimular la producción de neurotransmisores y de purificar el ambiente.
En esta publicación conoceremos las propiedades benéficas del incienso, así como las bases científicas que lo respaldan.
- Breve reseña histórica:
La quema de incienso fue descubierta en la India y el sur de Asia, existiendo registros de su empleo en el año 3.500 a.n.e. El posterior comercio de especias jugó un papel determinante para el intercambio de bienes y artículos entre el mundo occidental y el oriental, permitiendo la existencia de un significativo mercado que rápidamente se fue abriendo paso a través del Levante, Egipto, Mesopotamia y la Península Arábiga. El uso generalizado de incienso en el antiguo Oriente generó una demanda colectiva tan importante, que terminó dando inicio a la famosa "Ruta del Incienso", en donde más de 3.000 toneladas de este producto se exportaban cada año a decenas de naciones. Por otro lado, en América, los pueblos nativos también emplearon hierbas y plantas para crear fragancias aromáticas con fines medicinales, terapéuticos y espirituales, similar al incienso de la India y Egipto. Famosa es la quema de palo santo, copal y salvia blanca entre los chamanes americanos para la purificación espiritual y la ofrenda religiosa.
- Base científica del incienso
Las culturas antiguas de todo el mundo se dedicaron a la práctica de quemar hierbas, plantas y resinas para eliminar las energías negativas, depurar el ambiente y sanarse de manera natural.
Se ha demostrado que esta práctica tiene un importante mérito científico, debido a la liberación de iones negativos que sus componentes desprenden.
Los estudios e investigaciones modernas concluyen que las propiedades de los iones negativos conducen a una mejora en el estado de ánimo, y, en consiguiente, a una sensación general de alivio y bienestar. Los iones negativos también son muy importantes para mantener el sistema respiratorio, digestivo y nervioso, y por si fuera poco, ayudan a controlar el insomnio, mejoran el rendimiento sexual y combaten las alergias.
Los iones negativos son moléculas inodoras, insípidas e invisibles que inhalamos en abundancia cuando estamos en entornos particulares, generalmente al aire libre, como en una montaña, un bosque o en el mar. Los inciensos prácticamente buscan emular estos ambientes dentro de nuestros propios hogares, haciendo uso de ingredientes totalmente naturales que podríamos encontrar en estos sitios.
Una vez que estas moléculas se inhalan y se absorben en nuestro torrente sanguíneo, los iones negativos producen reacciones bioquímicas que aumentan los niveles de serotonina, una sustancia química relacionada con el estado de ánimo, la cual, una vez estimulada, ayuda a aliviar la depresión, el estrés y el cansancio.
Y si bien la serotonina es un neurotransmisor que gobierna el control de las emociones y el estado de ánimo, lo cierto es que no se limita únicamente a estas funciones, ya que también se encuentra implicada en la formación y el mantenimiento de la estructura ósea, el funcionamiento del sistema vascular, la actividad motora y las funciones cognitivas.
En estudios de personas que padecen depresión crónica y estacional, se demostró que los generadores de iones negativos alivian la depresión tanto como los antidepresivos recetados. Los iones negativos también aumentan el flujo de oxígeno al cerebro, lo que aumenta el estado de alerta y garantizan un correcto proceso de homeostasis neuronal.
Cuando inhalamos un olor se envían señales a nuestro sistema límbico. Esta parte del cerebro es responsable de la memoria, las emociones y la regulación hormonal. Por ende, los diferentes aromas desencadenan variadas respuestas positivas en nuestro cerebro.
Estas son las bases de lo que actualmente conocemos como aromaterapia y flores de Bach, y nuestros ancestros lo sabían desde hace milenios. Ellos fueron grandes herbolarios que conocían con profundidad las propiedades y beneficios de las plantas y hierbas. Y fue por eso que decidieron compactarlas y quemarlas en formato de pequeñas varillas, el incienso.
- Propiedades y beneficios
1. Fomentar la relajación y estimular el sueño.
2. Inducir a estados de trance y meditación.
3. Reducir los niveles de estrés y de ansiedad.
4. Aumentar la producción de serotonina en el cerebro.
5. Promover la concentración y la creatividad.
6. Generar la dispersión de iones negativos.
7. Estimular el deseo sexual (afrodisíaco).
8. Purificar, depurar y limpiar el entorno.
9. Repeler malos olores e insectos.
De igual modo, uno de los principales usos que se le ha dado al incienso, tiene que ver con fines espirituales y religiosos. Utilizado junto con la adoración y la oración, la práctica de quemar incienso puede alejar a los espíritus malignos y a descargar nuestros hogares de cualquier frecuencia y energía negativa. De hecho, el humo penetrante de los inciensos comienza a limpiar inmediatamente el entorno, tanto en el plano físico como en el astral. Para acompañar este ritual de limpieza se puede recitar una oración, un mantra, o cualquier otra palabra significativa que fortalezca su intención de desterrar la mala energía.
Todo esto se sustenta en el hecho de que las varillas de incienso se fabrican con ingredientes completamente naturales que difuminan y limpian el ambiente, además de otorgar propiedades benéficas para nuestra salud. De hecho, anteriormente ya había publicado un artículo muy extenso acerca de las propiedades benéficas de múltiples hierbas y plantas, la cual adjunto en el siguiente link:
Además, es importante destacar que los inciensos pueden actuar como puerta de entrada al mundo espiritual, puesto que, como mencioné anteriormente, inducen a estadíos de trance, concentración y meditación.
Se considera que el incienso es una ofrenda por excelencia, razón por la cual lleva milenios siendo utilizado en templos, ceremonias y rituales de múltiples religiones. Por ejemplo, en el hinduismo existe una práctica rutinaria que se llama "Dhūpapūjā" (धुप), en la cual se le entrega una ofrenda de incienso a la Deidad. Este ritual de limpieza y ofrenda se extendió a todo el mundo, no por nada, en el Antiguo Egipto el incienso se apodaba como "El Sudor de los Dioses, y su utilización fue indispensable para las culturas y religiones del mundo, tanto del ayer como del presente.
A continuación entregaré las propiedades de algunos inciensos:
- Ruda: Es un excelente depurador que disipa energías, entidades y frecuencias regresivas, siendo ideal para rituales de limpieza, purificación y sahumerios, también combate el mal de ojo. Atrae prosperidad, augura un buen porvenir, y funciona como un amuleto de protección, al ser un imán de energías positivas. También otorga calma, claridad mental, relajación, estimula la intuición y las facultades psíquicas.
- Sándalo: Descongestiona las vías aéreas e infunde un aroma relajante y curativo. Induce a la concentración, la meditación y el buen humor. Ideal como ingrediente de sahumerio para depurar el ambiente, limpiarnos de bajas frecuencias y exorcizar, también combate el mal de ojo. El sándalo ofrece protección astral y se usa en la magia de deseos.
- Romero: Previene pesadillas y terrores nocturnos, promoviendo un sueño reparador y satisfactorio. Calma la mente, fomenta la amistad y el romance, disipa la depresión y la mala energía.
- Eucalipto: Limpia las vías respiratorias, mitiga la tos y el dolor de cabeza. Repele insectos. Brinda agudeza intelectual, claridad, ingenio. Refresca y revitaliza el ambiente.
- Menta: Aroma estimulante que se utiliza en rituales de amor y prosperidad, también es un afrodisiaco. Ayuda a descongestionar el sistema respiratorio. Brinda frescura y revitalización. Aleja la soledad interior y depura el ambiente.
- Clavo: Se usa para disipar la negatividad, purificar espacios sagrados y mágicos, atraer dinero y detener o prevenir la propagación de chismes. También se quema para la estimulación intelectual, el éxito empresarial, la riqueza, la prosperidad, la adivinación, el exorcismo, la protección, alivia los miedos, mejora la memoria y la concentración.
- Albahaca: Atrae fidelidad, amor y buenas energías. Se quema para exorcizar y proteger el entorno contra entidades malignas. También se usa para promover la concentración, la asertividad, la decisión, la integridad, el entusiasmo, la claridad mental y la confianza. Es un excelente incienso para cuando se realizan adivinaciones de amor.
- Lavanda: Induce a la relajación, el sueño, el descanso y la calma. Libera bloqueos y trata dolores de cabeza. Se utiliza para atraer el amor y promover el romance. La lavanda es un gran depurador que crea un entorno agradable de paz y sensación de bienestar.
- Aloe Vera: Excelente antioxidante. Combate el insomnio y la inquietud. Tiene una capacidad pronunciada para rejuvenecer el cuerpo. Su aroma ofrece una sensación de calma, serenidad, brinda fuerza, repele el mal de ojo y revitaliza el ambiente.
- Cedro: Se usa para rituales de purificación. Estimula y fortalece los poderes psíquicos, atrae el amor, previene pesadillas y cura diversas dolencias, incluidos los resfriados y dolores de cabeza.
- Miel: Favorece el romance y la unión de pareja. Endulza las situaciones difíciles, trayendo calma, serenidad y armonía. Trata la ansiedad y el insomnio. Propicia buena suerte.
- Pino: Carga el entorno de energía positiva, ya que es un gran limpiador de ambientes. Su aroma refrescante brinda una sensación de bienestar general y plenitud. Resulta muy energizante.
- Sauce: Su quema se utiliza para evitar el mal, atraer el amor y promover la curación. También es utilizado como incienso de ofrenda para las Deidades lunares.
- Coco: Revitalizante. Afrodisiaco, proporciona amor y estimula el romance. Ayuda a calmar la mente, ofrece protección, relajación y paz, alejando el miedo.
- Mirra: Depurador y protector por excelencia. Se usa para eliminar entidades negativas y disipar malas energías, favorece la meditación, el ritual mágico y la ofrenda a Deidades. Estimula la intuición natural y las facultades psíquicas. Combate el mal de ojo.
- Jazmín : Promueve la amistad, el amor, la belleza interior, y entrega una sensación general de felicidad y paz. Se utiliza principalmente en rituales de amor, ya que sirve para unir parejas y como un excelente afrodisíaco.
- Palo Santo: Su cálido aroma crea una sensación de tranquilidad, paz y armonía. Sirve como depurador y limpiador de hogares, disipando la mala energía y purificando tanto el aire como la mente. Promueve la dulzura y el amor. Tiene propiedades antisépticas, antirreumáticas, y es gran fuente de antioxidantes. Induce la meditación y calma la mente.
- Nag champa: Este es un popular aroma de incienso que combina diferentes tipos de ingredientes naturales, entre ellos; sándalo, magnolia champaca, azafrán cobre y frangipani. Crea un efecto calmante, disipa el estrés, otorga tranquilidad, relajación y mejora el estado de animo. Se utiliza mucho en las prácticas de hatha yoga, meditación, reiki, entre otras.
- Copal: Se utiliza para rituales de protección, limpieza y purificación espiritual. Su aroma brinda una sensación de paz y armonía. Aleja a los malos espíritus, equilibra el estado de la mente y depura la toxicidad. El copal es ideal para sahumerios, exorcismos, rituales de limpieza energética y para combatir al mal de ojo.
- Vainilla: Utilizado para rituales de amor. Favorece el romance y las uniones. Afrodisiaco. Brinda paz, tranquilidad y serenidad con su dulce y suave aroma. Revitaliza el cuerpo y activa los sentidos. Ideal para dormir y tratar el cansancio.
- Algunos consejos
¿Cuál incienso debo adquirir? Hallaremos cientos y miles de marcas en una vuelta rápida a cualquier tienda, feria o mercado, y por supuesto; en sitios de internet. Sin embargo, aquí surge un paradigma bastante complejo, puesto que la mayoría de los inciensos que se comercializan en tiendas genéricas son de muy mala calidad, ya que sus componentes son netamente artificiales, cosa que podría traducirse en un mero perfume procesado. Claro, a simple vista pueden oler tan bien como un producto natural, sin embargo, su inhalación puede resultar bastante peligrosa con el paso del tiempo, ya que contienen partículas toxicas como hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP), que son los mismos que se obtienen de la quema de combustibles y cigarrillos, además de formaldehído, derivados del nitrógeno, polvo de carbón, colorantes y aromas artificiales. En consiguiente, si usted quiere disfrutar de las propiedades medicinales, aromáticas y espirituales de un incienso, lo recomendable es adquirir uno de buena calidad, aunque su costo sea un poco más elevado en comparación a los genéricos, que principalmente cuestan un dólar o incluso menos.
Las varitas de incienso de buena calidad se componen únicamente de ingredientes naturales, entre ellas: plantas aromáticas, aceites esenciales, flores, madera y resinas, y, generalmente se fabrican a mano, y no por maquinaria industrial. Otra pista importante para reconocerlos, además de que su precio es mayor y de que sus ingredientes son naturales, es que los inciensos de buena calidad NO expelen una cantidad de humo desproporcionada ni tampoco son de colores vibrantes, más bien son opacos. Intente siempre adquirir inciensos de aromas que usted puede encontrar en la naturaleza, evitando aquellos tipo "piña colada", "chocolate blanco", "caramelo", "palomitas de maíz", o cualquier otro que evidentemente no exista en la naturaleza, ya en esos casos usted inhalará simples perfumes artificiales que podrían traerle problemas de salud. Utilice su nariz como guía: el aroma del incienso natural suele ser suave y sutil. En cambio, si el incienso huele a perfume, es una señal reveladora de que está hecho con ingredientes sintéticos.
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