> Funeral Vudú: Beneficios de la Cremación para el alma de los difuntos

viernes, 19 de junio de 2020

Beneficios de la Cremación para el alma de los difuntos


La teosofía, el budismo y el hinduismo, así como otras corrientes de origen oriental; sostienen que es mucho más beneficioso, de varias maneras, que los cadáveres sean incinerados en lugar de enterrados. En los países orientales, la cremación es una práctica súmamente común y defendida, y lo ha sido desde hace milenios, sobretodo entre la población devota y espiritual. La primera cremación en Occidente se llevó a cabo en Estados Unidos recién en el año 1876, tras la muerte de Joseph Henry Louis Charles; quien fue teosofista y uno de los primeros miembros Sociedad Teosófica, más tarde, Helena Petrovna Blavatsky, quien fue la líder y fundadora de este movimiento; se transformó en la primera persona en ser cremada en el Reino Unido, luego de su muerte en mayo de 1891. Por lo tanto, es completamente notable que muchas de estas corrientes recomiendan empedernidamente (por razones metafísicas y esotéricas) la cremación de los difuntos, y aquí se hablará del porqué.


Hay quienes temen o creen que el proceso de cremación evitará que el alma pueda pasar al Cielo. A otros les preocupa que la cremación de alguna manera dañe o destruya el alma. Las enseñanzas de la Teosofía e Hinduismo disipan estos conceptos totalmente erróneos, con dos puntos básicos: 


(1) El alma abandona el cuerpo cuando ocurre la muerte física y, de hecho, es esta partida del alma la que causa la muerte del cuerpo. 
(2) El alma no es algo físico o material y, por lo tanto, no puede verse afectado de ninguna manera por el fuego, que es un elemento físico. 

Como William Quan Judge explicó una vez en respuesta a una pregunta en "El Foro Teosófico"; 

"El fuego material solo puede tener un efecto sobre la materia y la sustancia que pertenezcan al plano material (es decir, al físico), por lo tanto, el proceso de cremación no puede perturbar, dañar o afectar negativamente cualquier parte de nuestro ser que no sea el cuerpo físico".

Y este es un pensamiento muy aceptado por diversas corrientes orientales, ya que ellos entienden que la muerte no es el fin de nuestras vidas sino que el inicio de un nuevo ciclo, y que por lo tanto; el fuego es un método efectivo para dar término con lo que alguna vez fuismos; ya que se encarga de separar el alma del cuerpo. Cuando un budista o hinduista se encuentra al borde de la muerte; sus amigos cercanos y los miembros de su familia se sientan alrededor de él, ayudándolo a sentirse tranquilo y en paz. La muerte es una parte natural e inevitable del ciclo de vida, y la persona moribunda debe aceptar esta realidad. Los amigos y la familia deberían ayudar a la persona que está muriendo a reflexionar sobre sus buenas acciones; y el poder que éstas tendrán sobre su próxima encarnación. El cuerpo del moribundo puede estar acompañado de estatuas religiosas (de Buda o de dioses hindúes), y se pueden cantar "parittas" o versos protectores. En términos más generales, la persona moribunda debe sentirse lo más cómoda posible antes de morir.



Entonces; ¿cuáles son algunos de los beneficios reales de la cremación?:

#1: El cuerpo astral se va desintegrando después de la muerte al mismo ritmo que lo hace el cadáver físico, para luego separarse totalmente. Entendiendo lo anterior; el alma no abandona el cuerpo inmediatamente tras morir, sino que permanece cerca, decayendo y disipándose junto con el cuerpo físico que anteriormente había vitalizado. Si el cuerpo físico está simplemente enterrado, los restos del cuerpo astral permanecerán allí por mucho más tiempo, y esto puede tener consecuencias indeseables. Pero si el cuerpo físico es incinerado después de la muerte, el cuerpo astral se disuelve a mayor velocidad, permitiendo su "liberación". 

#2: La cremación da como resultado que el alma difunta se libere en gran medida de cualquier atracción restante que pueda tener hacia la Tierra y las cosas del plano físico, que de lo contrario podría ser un obstáculo en la primera parte del proceso posterior a la muerte. Y esto es súmamente importante, sobretodo en personas que hayan sufrido muertes repentinas, causadas por accidentes, asesinato o incluso suicidio. 

#3: Continuando con el punto anterior; los hindúes tradicionalmente creman a sus muertos porque una disolución ardiente del cuerpo trae una liberación más rápida y completa del alma, ya que el entierro preserva la conexión psíquica del difunto con su vida terrenal recién terminada. Después de la muerte, el alma difunta se cierne cerca del plano terrestre en su cuerpo astral, unida emocionalmente al cuerpo físico y a su antiguo entorno, aún capaz de ver este mundo material. Los ritos funerarios y la quema del cuerpo significan liberación espiritualya que el fuego corta los lazos con la vida terrenal y da impulso al alma del difunto, notificándole al mismo tiempo que de hecho, la muerte ha llegado, y que es momento de abandonar este plano de existencia. Algunos de los cantos funerarios se dirigen al difunto, instando al alma a renunciar a los apegos materiales o pasionales para así poder continuar con su viaje espiritual. Los dioses y los devas son invocados para ayudar al alma en su transición. La creencia hindú en la reencarnación asegura que la muerte es simplemente la liberación del alma de la vida actual. Cuando una persona muere en la India; su familia y amigos participan activamente en los rituales funerarios; preparan el cuerpo, los materiales y todos los elementos necesarios para ejecutar la cremación. Después de ello, las cenizas se destinan ceremonialmente a un río (a menudo el Ganges), al lago o al océano, junto con guirnaldas y flores, en países budistas como Japón o China; las cenizas se suelen conservar en urnas, y normalmente se dejan junto a los altares familiares. Como dato adicional, me gustaría decir que las antiguas escrituras orientales amonestan la lamentación excesiva del difunto; y alientan la liberación gozosa, ya que el alma difunta siente el impacto de las fuerzas emocionales dirigidas hacia él, y el duelo prolongado puede mantenerlo en la conciencia terrenal, inhibiendo la transición completa a los mundos internos. Los hindúes hablan de la muerte como la Gran Partida, y la consideran el momento más exaltado de la vida.

Es por todo lo anterior que los hindúes llevan milenios adorando a Agni, el señor y Dios del fuego, el sumo sacerdote divino que toma las ofrendas humanas para llevárselas a los Dioses, y el primero en acudir a la invocación. Al final de la vida, es Agni a través de las llamas de la pira funeraria quien acepta el cuerpo como última ofrenda (Antieshti), y lo destruye de toda ilusión. Si usted desea saber más sobre este Dios y el significado esotérico del fuego, visite el siguiente enlace: 


#4: En palabras de William Judge; "Desde un punto de vista sanitario, la cremación es de gran importancia, ya que elimina la materia perjudicial o la materia en un estado que puede ser perjudicial para los vivos". Elimina rápida y limpiamente el cuerpo físico fallecido, eliminando muchas cosas desagradables y dañinas en el proceso. Aquí en Occidente, nos hemos convertido en expertos en no pensar. Seguramente es solo la negativa a pensar realmente en las cosas y la negativa a enfrentar los hechos lo que nos ha llevado a continuar la práctica ilógica y bastante grotesca de enterrar cadáveres bajo tierra durante tanto tiempo. Si uno de nuestros seres queridos fallece, ¿por qué querríamos prolongar la horrible putrefacción y descomposición de sus restos mortales sellando esos restos en una caja de madera y luego enterrándolos a unos metros bajo tierra? ¿Y cómo podemos estar en paz, sabiendo que el cuerpo que una vez albergó el alma de nuestro querido miembro de la familia o amigo ahora está siendo sometido innecesariamente a un destino tan desordenado, espeluznante y prolongado? 

Realmente no se puede decir nada a favor del entierro, pero sí mucho a favor de la cremación. Muchas personas descubren que experimentan un cierto grado de "cierre emocional" después de que su ser querido ha sido incinerado, lo que de otro modo no hubieran podido obtener con el constante pensamiento de que "el cuerpo yace en la tumba". En 1881, Blavatsky publicó un artículo titulado; "Pensamientos extraviados sobre la muerte y Satanás", que consistía en la recopilación de notas inéditas del cabalista y ocultista Eliphas Levi, acompañadas con notas al pie de página con los comentarios de Blavatsky. Levi escribió sobre el entierro: 

“La preservación de los cadáveres es una violación de las leyes de la naturaleza; Es un ultraje contra la modestia de la muerte, que oculta las obras de destrucción, ya que debemos ocultar las de la reproducción. Preservar cadáveres es crear fantasmas en la imaginación de la tierra ["Intensificar estas imágenes en la luz astral o sideral", explica Blavatsky]; Los espectros de la noche, de las alucinaciones y del miedo, no son más que fotografías errantes de cadáveres preservados. Son estos cadáveres preservados o destruidos imperfectamente los que se propagan entre los vivos; la peste, el cólera, las enfermedades contagiosas, la tristeza, el escepticismo y la depresión. La muerte es exhalada por la muerte. Los cementerios envenenan la atmósfera de las ciudades, y el miasma de los cadáveres arruina a los niños incluso en el seno de sus madres ". 

Uno de los principales objetivos del Movimiento Teosófico es presentar claramente la comprensión correcta de la verdadera naturaleza del ser humano, para que podamos comprender adecuadamente quiénes y qué somos realmente y cuál es la naturaleza y la función de nuestros Siete Principios (Constitución Septenaria), tanto durante y despues de la vida.



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Nota final: esta publicación será reeditada y reposteada al sitio web HINDUISMO SAGRADOdel cual yo también soy dueño y administrador. 


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