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domingo, 8 de septiembre de 2019

¿Cuál es la apariencia de los Anunnaki? ¿Cómo son físicamente? ¿Cuál es su aspecto?


Los Anunnaki son seres vivos como nosotros, pero tienen la capacidad de vivir durante miles de años, además poseen una tecnología de altísimo nivel, dotada de grandes descubrimientos y avances científicos, razón por la cual, nuestros ancestros pensaban que eran "dioses", e incluso, seres "inmortales". Los Anunnaki no fueron la primera raza extraterrestre en llegar a nuestro planeta, pero sí la primera en colonizar diferentes regiones, estableciendo sus castas, metrópolis y linajes, esto, hace unos 350.000 años atrás en Irak, y fueron ellos el origen de toda religión y creencia. 

Para los Anunnaki la Tierra era un planeta abundante en valiosos minerales y recursos, además de funcionar como un lugar transitorio entre sus viajes de exploración. 

En esta publicación veremos la apariencia de los Anunnaki, cómo eran y cuál es su aspecto, basándome plenamente en la investigación de los antiguos textos y relatos. 



Primero, debemos tener claro que los Anunnaki no son una "raza" como tal, más bien, son un conjunto de diferentes razas extraterrestres, las cuales habitan un mismo planeta en común llamado "Nibiru", que significa: "Divido entre dos", haciendo referencia a la lucha entre estas razas que habitaban y compartían este planeta. Algunos tienen forman humana, muy idénticos a nosotros (pues nos crearon a su imagen y semejanza, como narran los textos de creación sumeria), pero también, en menor porcentaje, hay Anunnakis que poseen una apariencia draconiana, es decir; reptiliana; forma de reptil. 

En el arte de absolutamente todas las culturas ancestrales, sin importar el idioma o el continente, podemos apreciar esculturas y representaciones de dioses con forma humana (como Anu, Enlil, Ninhursag, Marduk etc), así como también existen otros con forma y apariencia de reptil (como Enki, Pazuzu, Nammu, Oannes etc), y tampoco es casualidad que las representaciones más antiguas provengan precisamente de esta región, Irak; la Antigua Mesopotamia (región compuesta por las civilizaciones de Sumeria, Acadia, Babilonia, Asiria, Hitita y otras circundantes).

Pero antes... ¿Todos los dioses de la antiguedad y de las mitologías y religiones ancestrales son seres Anunnakis? SÍ, son Anunnakis. ¿Por qué afirmo esto con tanta seguridad? Sencillo, porque existen pruebas innegables las cuales se obtienen luego de realizar profundos trabajos de mitología y religiones comparadas, donde comprobamos que en el fondo, todas las culturas y pueblos narraron absolutamente los mismos acontecimientos y creencias, es decir; todas fueron testigos de estos dioses, eso sí; bajo distintos contextos, idiomas e interpretaciones (es por ello por ejemplo que los dioses egipcios o hindúes tengan semejantes apariencias, nada es literal, no existió un dios con cabeza de halcón o de león, ni tampoco dioses azules con cuatro brazos y tres cabezas, todas estas representaciones guardan mensajes ocultos, insisto, no son literales, son todas metáforas esotéricas. Recordemos que antiguamente el conocimiento sagrado no era abierto para todo el público, sino que era estudiado por pequeños grupos de adeptos e iniciados, es por ello que guardaron el conocimiento de esta forma).   

Veámos un ejemplo en donde podemos comprobar que todos los dioses de la antiguedad son Anunnakis. Por ejemplo, es fácil reconocer a Enki como un dios protector y lleno de sabiduría a lo largo de todo Mesopotamia, todos coinciden en que Enki se dedicó a proteger al hombre y a entregarle sabiduría, conocimientos sagrados y tecnología. En Mesomaérica, coincidentemente tenemos al dios "Quetzalcóatl", la "serpiente voladora" y protectora de la humanidad, quien transmitió sabiduría y tecnología como regalo a los hombres, tal como lo hizo Enki. En Grecia, Enki era conocido como "Prometeo", "el portador de la luz" quien le robó el fuego del conocimiento a los dioses para iluminar y guiar a la humanidad. Además, ambos crearon al hombre por medio de la arcilla y del barro (metáfora para describir una intervención genética), ambos tuvieron una ayudante en este proceso: Atenea y Ninhursag respectivamente, ambos rescataron al hombre de la furia y destrucción de un dios superior y malévolo; Enlil y Zeus respectivamente (Zeus envió un diluvio universal y creó la Caja de Pandora, otra metáfora griega para codificar el odio de Zeus a la humanidad. Zeus, es Enlil-Yahvé-Moloch, comparten los mismos atributos). Finalmente, tanto Prometeo como Enki se ganaron el odio de los demás dioses por haber estado de parte de los humanos, y fueron castigados. El diluvio universal también es otra fuente primordial para asegurar que todos los dioses de la antiguedad eran Anunnakis. Dado que los relatos más antiguos de este acontecimiento provienen de Mesopotamia, como la Tablilla de Gilgamesh, de Ziusudra y de Atrahasis, no es coincidencia que también se encuentre presente en muchos rincones del planeta, por ejemplo y a grandes rasgos, en Mesopotamia fue Enki y su legión de dioses benévolos quienes rescataron al hombre del diluvio enviado por Enlil, en la India, fue Matsya, un dios con forma de pez quien a su vez fue la primera encarnación de Vishnú, el padre protector. Esto es curioso, ya que Enki no solo era relacionado con las serpientes y reptiles, sino que también con los peces. En Egipto, coincidentemente, el dios y padre creador, Ptah, era conocido como el "señor de las serpientes y los peces", y en la India, los señores serpientes eran los Naga, quienes vivían en un mundo subterráneo (coincidentemente tal como lo hacía Enki según los textos sumerios: el Apsu, su reino intraterrestre), además, los hombres peces en Mesopotamia eran conocidos como los Kulullû, como Oannes: los encargados de transmitir sabiduría, tecnología y protección. En la cultura mapuche tenemos a la serpiente que salvó a los humanos del diluvio: "Tren Tren Vilu", y en la cultura Maorí, el dios “Tangaroa”, dueño del mar y de las aguas (al igual que Enki), es atacado por su hermano “Tawhirimatea”, dios del viento y de las tormentas (al igual que Enlil) (Enki y Enlil también eran hermanos). Las "coincidencias" también se extienden por los Andes, donde tenemos al dios protector Viracocha, quien equivale perfectamente con la imagen de Quetzalcóatl, y por ende; Enki. ¿Se dan cuenta? Estamos hablando del mismo ser, de la misma historia: ¡todos los antiguos dioses eran Anunnakis! Y eso que yo solamente tomé la imagen de un dios, imaginen si lo hacemos con todos. ¿Otro ejemplo? Los romanos adoraban a Baal, y le rendían homenaje en el Templo de Júpiter, como arrojan las evidencias históricas. Pero esto no es coincidencia, ya que Baal ("Señor") fue uno de los principales dioses de Asia Menor, cuya etimología y atributos son muy similares a los de Enlil, por ende, los académicos no dudan en identificar a Baal con Enlil. Enlil a su vez es identificado como "El", el dios cananeo y principal deidad de muchos de pueblos, precursor de Moloch, el dios de Ugarit. Por si fuera poco, Enlil es también, y como hemos visto anteriormente, identificado como "Yahvé", el dios hebreo, y Yahvé precisamente es también identificado con "El" y "Señor" (aunque los fanáticos religiosos lo nieguen), por lo tanto, Enlil es la raíz semítica de todos los dioses supremos,pero esto no termina aquí, ya que el equivalente griego para Enlil, es Zeus, y el equivalente romano de Zeus, es ¡Júpiter!

Lecturas sugeridas:



A grandes rasgos

A grandes rasgos los Anunnaki son seres muy altos, llegando a medir entre los 2 a 4 metros de estatura, siendo ésta una de sus principales características. En la antiguedad, los Anunnaki dejaron descendencia directa, mezclando sus genes con el hombre moderno para dar origen a los "Nephilims", los gigantes de la antiguedad, mal llamados "ángeles caídos", quienes fueron estratégicamente escogidos para ocupar importantes roles dentro de las sociedades, como reyes, faraones, sumo sacerdotes, y guerreros. La mayoría de los Anunnaki son regresivos, polarizados negativamente, es decir; conflictivos, destructivos, temperamentales, conquistadores, expansionistas, fríos, sanguinarios, estrategas y ególatras, tienden a actuar a sangre fría y sin remordimientos (aquí recalco nuevamente; estamos hechos a su imagen y semejanza...). Aunque obviamente hay excepciones, también existen Anunnakis benévolos, amorosos y pacíficos, como Enki, el verdadero padre, protector y guía de la humanidad, quién rompió sus relaciones con el resto de los Anunnaki para luchar por el ser humano, creando su propia legión de dioses bondadosos que se dedicaron a compartir sabiduría y brindar protección. Esta historia la puede leer en mi publicación anterior:


Con forma de Reptil


Como podemos observar arriba, existen representaciones de seres y dioses con forma de reptil en todos los rincones del planeta, sin excepción. Estos se caracterizan, además de ser muy altos, por sus típicas cabezas y cráneos alargados, además de poseer una piel particularmente escamosa, de hecho, los artistas emplearon técnicas que buscaban emular la piel de los cocodrilos o serpientes, recreando sus escamas, como podemos comprobar en la siguiente fotografía:


Enki (de bebé) y Nammu: (nótese la presencia de escamas y cráneos alargados)


Pazuzu:



Las mismas imágenes las podemos encontrar a lo largo de todo América:



No solo en América tenemos representaciones y relatos sobre dioses y seres con forma de reptil, sino que también en todo África, como ya he mencionado en muchas ocasiones. Destaco en particular estas estatuas encontradas en Sierra Leona: 






Con forma humana


Al ser los Anunnaki un conglomerado de diferentes razas, es lógico pensar que dentro de ella existan seres con forma humana, y de hecho, estos humanos descienden principalmente de una raza conocida como los "Lyranos", una de las más antiguas del universo. En los relatos y en las representaciones mesopotámicas, los dioses con forma humana, además de ser muy altos, tenían largas barbas y cabelleras, a diferencia de los reptilianos que carecían de estos atributos, incluso algunas veces eran retratados de piel blanca y rasgos caucásicos, como ojos azules, algo que los distinguía entre la sociedad (de hecho, los seres humanos que nacían con rasgos caucásicos, eran considerados como hijos directos de los dioses). Estos dioses también ostentaban joyas, relojes y vestimentas distintivas, al parecer cuidaban mucho de su apariencia. 

Cuando se realizó la intervención genética para modificar al Homo erectus, en los laboratorios de Irak ("fábricas de carne", según los relatos sumerios), los Anunnaki escogieron precisamente el ADN de aquellos que poseían forma "humana", es por ello que nosotros compartimos su fenotipo. Los primeros humanos eran de tes oscura, es decir; morenos (como un árabe, un nativo americano o un hindú moderno) y negros (como un africano), de hecho, en los textos mesopotámicos el hombre fue bautizado por los mismos dioses como "saĝ-gi-ga", que significa: "gente de cabezas negras". Si bien los dioses Anunnaki son blancos, en genética, el color negro está por sobre el color claro, lo que se conoce como “dominancia de genes”, esta dominancia estaba marcada por los genes del Homo erectus y sus antecesores, los cuales eran muy oscuros, tanto de piel como cabello, sin embargo, esto no quiere decir que no hubiesen humanos blancos e incluso caucásicos con ojos azules y cabellos rubios, castaños o rojos, de hecho hay representaciones de estos rasgos en lugares como Perú, la India, China, África y la misma Mesopotamia.  



Estos dioses son nuestro reflejo pues estamos hechos a imagen y semejanza. Ya depende de los estudios e investigaciones que hagamos para establecer quiénes estaban de nuestro lado y quiénes querían destruir a la humanidad. 

Anunnakis en torno al árbol del conocimiento:


Marduk:

Enlil, a la derecha:


Ishtar:

Representación moderna de los dioses Anunnaki:


Zeus-Júpiter-Enlil-Yahvé:



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