Funeral Vudú: Baalbek, el templo de los antiguos dioses sumerios

Baalbek fue una vez uno de los lugares más sagrados del mundo, y sus templos; megalíticas y perfectas construcciones, son claros vestigios de un pasado extraordinario, y a su vez desconocido.

En tiempos modernos, sin embargo, Baalbek está olvidado, borrado del mapa por la ciencia y la arqueología, probablemente al ser un enigma cuyo origen contradice lo que pensamos sobre la historia ortodoxa de la humanidad.

A pesar de todo, Baalbek es de aquellos sitios a los que simplemente podemos catalogar como "imposibles", y que puede ser comparado con la misma ingenieria y arquitectura que fue empleada en sitios como Tiahuanaco, Sacsayhuaman o Giza, y todos, coincidentemente: lugares sagrados, en donde alguna vez habitaron los Dioses provenientes de las estrellas, como nos narran los antiguos textos mesopotámicos. Con un pequeño análisis de mitología comparada también descubriremos que Baalbek fue una metrópolis levantada por el Dios Mesopotámico Enlil, adorado en tiempos romanos bajo el nombre de Júpiter, y en tiempo judaico como Yahvé; el destructor de la humanidad.

Hace dos mil años atrás, los emperadores romanos viajaban miles de kilómetros a este remoto lugar para hacer ofrendas a sus Dioses, y recibir oráculos sobre el destino de su Imperio. De hecho, fue aquí donde los romanos construyeron sus templos más grandiosos, siendo el de Júpiter y el de Baco alguna de las obras arquitectónicas más increíbles de todo el planeta. Sin embargo, tan magnífico como lo son estos templos, son los enormes bloques de piedra pre-romana de colosales dimensiones, esculpidas y ensambladas con suma precisión.

Si bien los terremotos, las guerras y el pasar de los miles de años han transformado lo que alguna vez fue una inmensa metrópolis en ruinas, aún es posible dislumbrar de sus obras, recalco: imposibles incluso para nuestra tecnología.

Templo de Baco

Lo más llamativo de Baalbek son sus asombrosas y despampanantes plataformas: es decir, los enormes bloques de piedra perfectamente esculpidos y moldeados, los cuales llegan a pesar entre 800 y 1.200 toneladas cada uno. Muchas de estas plataformas se encuentran reposando en columnas de piedras que se alzan hasta los 6 metros de altura, y es aquí en donde debemos preguntarnos: ¿Cómo los antiguos hombres lograron, primero que todo esculpir y moldear estos enormes bloques de piedra de 800 toneladas, para luego trasladarlos desde la cantera de piedras hasta el lugar, y finalmente, levantarlos a 6 metros de altura?

Cabe recalcar que estas plataformas estaban allí mucho antes de la llegada de los romanos, quienes simplemente las utilizaron para construir sus templos.

Cuando además se considera el tamaño y el peso de las piedras, y el hecho de que la ruta desde la cantera hasta la metrópolis no es plana; el transporte por cualquier medio convencional presenta un dilema aparentemente imposible. Además, un misterio aún mayor rodea la manera en que las piedras fueron ajustadas con increíble precisión.

Los romanos llegaron a esta región y construyeron sus templos encima de los bloques de piedra, que ya estaban allí. Sin embargo, la ciencia convencional no nos dice nada al respecto. Más curioso aún, es el hecho de que ningún emperador romano se haya atribuido la construcción de tal obra. De hecho, no hay evidencia de ninguna civilización conocida que haya tenido la tecnología necesaria para erigir las colosales piedras que vemos en la terraza de Baalbek ¿Quién podría haber construido estos cimientos y por qué? Reitero, es exactamente lo que sucede con Tiahuanaco, Sacsayhuaman y Giza, la arquitectura es similar.

El asunto se pone más interesante cuando un escritor libanés llamado Mikhai'l Musa Aluf al-Ba'labakk, escribió en su libro "Histoire de Baalbek", de 1890, lo siguiente:

“Después del diluvio, cuando Nimrod reinó en Libanus, envió gigantes para construir la fortaleza de Baalbek, que fue nombrada en honor a Baal, el Dios de los moabitas y adoradores del sol".

El relato de Mikhail'l tiene una parte confiable y una parte cuestionable. La confiable es que nos acerca al origen de Baalbek, que como he dicho a lo largo de esta publicación; fue construida para el señor Enlil: uno de los patrones de Mesopotamia. La parte cuestionable, es que su contexto no es de fiar ya que el autor tiene influencia islámica, y el personaje citado, Nimrod, genera más dudas de las que ya existen.

Comenzaré por la parte cuestionable: Mikhail'l jamás citó alguna tablilla o texto antiguo que avale esta idea, incluso el mismo protagonismo de "Nimrod" resulta ser confuso, puesto que Nimrod es un nombre bíblico que emplearon los hebreos para describir a un rey mesopotámico, supuestamente rebelde y tirano que desafió la voluntad de Yahvé, ya que se rebeló en su contra al construir la "Torre de Babel".

Sin embargo, esto se transforma en otro gran problema, puesto que la biblia se caracterizó por haber tomado la imagen de muchos reyes, faraones y personajes históricos para calumniarlos; inventando historias falsas con el fin de fortalecer la unión del pueblo hebreo y desprestigiar a sus adversarios en un ingenioso movimiento geopolítico.

Y uno de los ejemplos más claros para argumentar lo que digo, es lo que sucede con el rey de Babilonia; Nabucodonosor II, a quien los hebreos tildaron de ser un gobernante tirano, genocida y déspota. Sin embargo, la historia empírica nos dice todo lo contrario, incluso, Nabucodonosor II es considerado un héroe y uno de los más grandes arquitectos de la historia, además de ser un gran estratega y gobernante.

No existe la más mínima prueba que pueda corraborar las afirmaciones que hace la Biblia en contra de este rey, ya que según ella: Nabucodonosor II ejecutaba judíos en la fosa de los leones, y más tarde, intentó ejecutar a 3 judíos en un horno ardiente (siendo salvados mágicamente por un ángel de Yahvé). La Biblia también miente diciendo que Nabucodonosor II padecía de constantes pesadillas y sueños proféticos, teniendo que ser ayudado por el profeta judío Daniel, y finalmente, la Biblia dice que Nabucodonosor pasó sus últimos 7 años de vida viviendo como una bestia salvaje, peludo y con largas garras sin cortar, alejado de toda civilización e inmerso en una locura por no aceptar el poder del dios Yahvé, sin embargo, nada de esto se encuentra registrado en los anales babilónicos ni en ningún otro escrito contemporáneo, nisiquiera posterior. Simplemente, la Biblia inventó estas calumnias para perjudicar políticamente a la nación babilónica y a la imagen de su rey, puesto que eran pueblos enemigos. Por las mismas razones la Biblia siempre habla mal de los egipcios, de los caldeos, de los fenicios etc., e inventaron toda clase de historias fantásticas que jamás ocurrieron solo para desprestigiar a las naciones enemigas.

Y digo esto para no dejarnos llevar por la descripción que la Biblia ofrece sobre Nimrod.

Sin embargo, también es curioso señalar que no existe ningún otro texto que hable sobre Nimrod, además del bíblico. Algunos estudiosos plantean que la identidad original de este personaje fue "Nĭnus", un rey mesopotámico que era estudiado por los griegos (contemporáneos a la biblia), de quien tampoco hay muchos registros históricos. Otros investigadores lo asemejan con "Tukulti-Ninurta I", rey de Asiria, o con "Enmerkar", rey de Sumeria, y es en este último en donde se encuentra la verdadera identidad de Nimrod, veámos:

Según los hebreos Nimrod construyó la Torre de Babel, pero esta fue una ofensa contra dios, así que Yahvé la destruyó y luego confundió las lenguas del hombre.

Según los textos sumerios, Enmerkar construyó la ciudad de Uruk (en donde habían muchas torres Zigurats, que son las estructuras en las cuales los hebreos se basaron para el relato de la Torre de Babel). Luego, Enmerkar levantó un templo en honor a su dios Enki, señor de la Ciencia, quien confundiría la lengua de los hombres.

Además, la biblia nos dice que Nimrod era un fenomenal y vigoroso cazador. Y ahora viene lo más impactante; resulta que "kar", en sumerio, es "cazador", además, según la Tablilla Real Sumeria, Enmerkar gobernó después del diluvio, al igual que Nimrod según el génesis.

En conclusión, los judíos tomaron la imagen del rey Enmerkar y la desfiguraron y calumniaron para beneficio propio, tal como hicieron con Nabucodonosor II.

Además, Enmerkar vivió en el año 4.000 a.n.e., y se le conoce por fundar Uruk, una de las ciudades más antiguas del planeta, mientras que el Génesis hebreo fue escrito recién en el año 450 a.n.e., por lo tanto, no hay motivos como para aceptar el relato que nos ofrecen los judíos sobre Nimrod, quien es realmente Enmerkar.

Por otro lado, las afirmaciones de Mikhai'l Musa Aluf al-Ba'labakk no son del todo erradas, puesto que muchos reyes y sacerdotes de Mesopotamia (y Egipto) fueron gigantes, es decir: descendientes híbridos de los Dioses Anunnaki, como se narra en los textos mesopotámicos.

Continuando con el tema, Helene Sader, quien es profesora de arqueología en la Universidad Americana de Beirut, comenta que esta pequeña ciudad, Baalbek, carecía de suficiente importancia comercial o estratégica, por lo tanto, es evidente que su construcción estuvo ligada principalmente a fines religiosos.

Como dato adicional, me gustaría agregar que en la actualidad existen grúas industriales capaces de levantar 1.200 toneladas de peso, como la Gottwald AK912 (abajo en la foto). Pero resulta que este tipo de grúas no tienen la capacidad de moverse mientras transportan tales cargas. ¿Contaban los antiguos hombres de Baalbek con tecnología superior a esta? ¿Cómo se arrastraron las piedras desde la cantera hasta Baalbek? La sugerencia habitual es que las piedras megalíticas fueron trasladadas usando un sistema de rodillos de madera, misma hipótesis que nos dicen sobre Giza o Isla de Pascua. Sin embargo, tales rodillos serían aplastados por un peso mucho más ligero que 800 toneladas, ni hablar de 1.200.

Baalbek, vestigio de una antigua ciudad Anunnaki en tiempos de Roma:

Una pista importante para descubrir los orígenes de Baalbek y su relación con los pueblos mesopotámicos, proviene de los griegos, quienes llamaron a esta ciudad bajo el nombre de "Heliopolis", que significa: "la ciudad de Helios". Helios era un Dios solar, el cual podía atravesar el cielo gracias a su "carro celestial", y Baalbek, era entonces, el presunto lugar de descanso de ese carro. Cosa que calza totalmente con el relato de Mikhai'l al asociar a Baal con el sol.

Hablamos del mismo principio esotérico pero representado con distintas deidades, y ahora lo explicaré mejor:

Los romanos adoraban a Baal, y le rendían homenaje en el Templo de Júpiter, como arrojan las evidencias históricas. Pero esto no es coincidencia, ya que Baal ("Señor") fue uno de los principales Dioses de Asia Menor, cuya etimología y atributos son muy similares a los de Enlil, ya que básicamente son Dioses sincretizados, por ende; Baal se identifica con Enlil según los académicos. Enlil a su vez es identificado como "El", el Dios cananeo y principal deidad de las regiones circundantes. Por si fuera poco, Enlil es también, y como hemos visto anteriormente, identificado como "Yahvé", el dios hebreo, y Yahvé precisamente es identificado también con "El". Esto nos lleva a pensar que Enlil es la raíz semítica de todos los dioses supremos, pero esto no termina aquí, ya que el equivalente griego para Enlil es Zeus, y el equivalente romano de Zeus, es Júpiter.

Es por ello que los romanos adoraban a Júpiter en el templo de Baal, ya que en teoría; son la misma entidad.

¿Fue Baalbek una metrópolis erigida por el antiguo dios Enlil?¿Fue su base? ¿Por qué tantas culturas y civilizaciones girarían en torno a esta figura?