Los símbolos de la masonería son un lenguaje que contiene un significado externo, interno y secreto, de estructura triádica, un lenguaje común que se encuentra en la mayoría de las escuelas de misterio.
Las enseñanzas y prácticas de la orden secreta fraternal de los masones libres se remonta desde hace siglos, incluso, prácticas similares y equivalencias se han registrado en el tiempo de Babilonia, Egipto y Grecia, y muchas de sus simbologías y arquetipos sagrados provienen justamente de estas culturas. La masonería cobró más fuerza durante la Edad Media, cuando el cristianismo comenzó a perseguir y a censurar el pensamiento libre, de hecho, la Iglesia Católica fue el principal opositor de las corrientes masónicas, debido a que sus creencias difieren fuertemente de las enseñanzas abrahámicas, ya que se encuentran influenciados por el platonismo, alquimismo, hermetismo, gnosticismo e incluso paganismo. En esta publicación veremos el significado de los símbolos masónicos más importantes.
La simbología siempre ha sido un método efectivo para preservar y transmitir el conocimiento sagrado. Es por ello que podemos encontrar su uso en un sinnúmero de corrientes espirituales, religiosas y filosóficas de cualquier lugar del mundo y en cualquier época. La simbología secreta también permite una forma de identificación subconsciente, creando un registro en la mente colectiva de las personas aunque éstas no comprendan su verdadero significado o intención, además, sirve de gran ayuda para retratar cosmovisiones y estructurar alegorías, que muchas veces se pueden desenglobar en diversos mensajes. Cabe decir que esto fue de gran ayuda en tiempos medievales, ya que permitía camuflar el conocimiento de las corrientes bajo símbolos y alegorías que solo los iniciados podrían comprender y percibir, no así el resto de personas o la misma iglesia, de este modo, evitaban ser perseguidos y asesinados. Esto ocurrió con la brujería, la alquimia, el hermetismo, el gnosticismo, la masonería y muchas otras corrientes más; las cuales ocultaron sus enseñanzas por medio de simbología, alegorías y metáforas, muchas de ellas muy complejas y estructuradas (como también ocurrió con la mitología griega y egipcia).
Las enseñanzas y prácticas de la orden secreta fraternal de los masones libres se remonta desde hace siglos, incluso, prácticas similares y equivalencias se han registrado en el tiempo de Babilonia, Egipto y Grecia, y muchas de sus simbologías y arquetipos sagrados provienen justamente de estas culturas. La masonería cobró más fuerza durante la Edad Media, cuando el cristianismo comenzó a perseguir y a censurar el pensamiento libre, de hecho, la Iglesia Católica fue el principal opositor de las corrientes masónicas, debido a que sus creencias difieren fuertemente de las enseñanzas abrahámicas, ya que se encuentran influenciados por el platonismo, alquimismo, hermetismo, gnosticismo e incluso paganismo. En esta publicación veremos el significado de los símbolos masónicos más importantes.
La simbología siempre ha sido un método efectivo para preservar y transmitir el conocimiento sagrado. Es por ello que podemos encontrar su uso en un sinnúmero de corrientes espirituales, religiosas y filosóficas de cualquier lugar del mundo y en cualquier época. La simbología secreta también permite una forma de identificación subconsciente, creando un registro en la mente colectiva de las personas aunque éstas no comprendan su verdadero significado o intención, además, sirve de gran ayuda para retratar cosmovisiones y estructurar alegorías, que muchas veces se pueden desenglobar en diversos mensajes. Cabe decir que esto fue de gran ayuda en tiempos medievales, ya que permitía camuflar el conocimiento de las corrientes bajo símbolos y alegorías que solo los iniciados podrían comprender y percibir, no así el resto de personas o la misma iglesia, de este modo, evitaban ser perseguidos y asesinados. Esto ocurrió con la brujería, la alquimia, el hermetismo, el gnosticismo, la masonería y muchas otras corrientes más; las cuales ocultaron sus enseñanzas por medio de simbología, alegorías y metáforas, muchas de ellas muy complejas y estructuradas (como también ocurrió con la mitología griega y egipcia).
SIMBOLOGÍA MASÓNICA
1. El Compás, la Escuadra y la "G"
La tríada de estos 3 elementos conforma el principal emblema masónico a nivel mundial.
La letra "G" tiene múltiples significados e interpretaciones.
Primero representa la palabra "Gnosis", que significa el conocimiento de los misterios espirituales y la divinidad del yo interior, que es un componente muy importante dentro de la tradición masónica, y obviamente del gnosticismo.
La letra "G" también significa "Geometría", que es la ciencia sagrada que da sostén a todo lo existente en el cosmos, y al mismo tiempo; también representa el nombre del señor supremo de la concepción masónica: "GADU" por sus siglas, o "Gran Arquitecto Del Universo". Los masones consideran que la geometría fue el precursor de la humanidad en las artes y las ciencias.
El compás es otro componente importante de la tríada.
Los compases son dispositivos que se conforman por dos extremidades de igual longitud, fijadas juntas en su ápice por una bisagra ajustable. Se utiliza para dibujar círculos y arcos, y también para tomar o marcar distancias. En efecto, para los masones; los compáses simbolizan nuestra intención de trazar una línea divisoria alrededor de nuestros propios deseos y pasiones, y nuestra determinación de mantenernos dentro de ese círculo de autocontrol y moderación, que es la base de la moralidad y la sabiduría. Obviamente, también simboliza la ciencia de la geometría.
Por último tenemos la escuadra, que es una regla con la forma de un triángulo isósceles. En la masonería, este es un símbolo de nuestra capacidad de usar las enseñanzas de la conciencia y la moral para probar y corregir nuestras propias acciones. Y es un recordatorio de que debemos tratar a las demás personas de forma justa y honesta, como a nosotros mismos nos gustaría ser tratados. No hace falta decir que también representa el arte y la ciencia de la geometría.
Es muy común que los lugares masónicos siempre posean pisos cuadriculados, también llamados ajedrezados o mosaicos, sobretodo rodeando el altar y los sitios de reunión. También se aprecia en un sinnúmero de obras artísticas, siendo un patrón muy común dentro de la masonería y con un gran significado alegórico.
El piso con este diseño representa "dualidad" y "equilibrio", también tiene connotaciones herméticas, ya que esta dualidad equilibra todo lo existente; "blanco" y "negro" son un símbolo hermético del cuarto principio de polaridad. Esto encarna la verdad de que todas las cosas están universalmente reconciliadas. Espíritu y Materia son solo dos polos de un mismo elemento en diferentes grados de vibración, lo cual se encuentra en el tratado de "El Kybalion", que recopila las antiguas enseñanzas herméticas:
La letra "G" tiene múltiples significados e interpretaciones.
Primero representa la palabra "Gnosis", que significa el conocimiento de los misterios espirituales y la divinidad del yo interior, que es un componente muy importante dentro de la tradición masónica, y obviamente del gnosticismo.
La letra "G" también significa "Geometría", que es la ciencia sagrada que da sostén a todo lo existente en el cosmos, y al mismo tiempo; también representa el nombre del señor supremo de la concepción masónica: "GADU" por sus siglas, o "Gran Arquitecto Del Universo". Los masones consideran que la geometría fue el precursor de la humanidad en las artes y las ciencias.El compás es otro componente importante de la tríada.
Los compases son dispositivos que se conforman por dos extremidades de igual longitud, fijadas juntas en su ápice por una bisagra ajustable. Se utiliza para dibujar círculos y arcos, y también para tomar o marcar distancias. En efecto, para los masones; los compáses simbolizan nuestra intención de trazar una línea divisoria alrededor de nuestros propios deseos y pasiones, y nuestra determinación de mantenernos dentro de ese círculo de autocontrol y moderación, que es la base de la moralidad y la sabiduría. Obviamente, también simboliza la ciencia de la geometría.
Por último tenemos la escuadra, que es una regla con la forma de un triángulo isósceles. En la masonería, este es un símbolo de nuestra capacidad de usar las enseñanzas de la conciencia y la moral para probar y corregir nuestras propias acciones. Y es un recordatorio de que debemos tratar a las demás personas de forma justa y honesta, como a nosotros mismos nos gustaría ser tratados. No hace falta decir que también representa el arte y la ciencia de la geometría.
Estos elementos identificativos y sagrados también se plasman en los anillos masónicos, los cuales se usan como símbolo de lealtad a la fraternidad, y también, como muestra de compromiso a las misiones y valores que un masón ha aceptado tener para el resto de su vida (honestidad, integridad, rectitud, búsqueda de conocimiento).
En pocas palabras, el anillo significa: "Soy digno de confianza para ti como Hermano de la fraternidad", ya que el usuario portador ha estudiado y aprendido los conocimientos necesarios de la logia, ha servido y convivido con sus hermanos, ha aprobado exámenes, ritos y se le ha otorgado el privilegio de representarse a sí mismo como masón. Por ello su uso debe ser exclusivo para quienes sean parte de la logia, y se porta con orgullo y devoción.
2. Piso Cuadriculado
Es muy común que los lugares masónicos siempre posean pisos cuadriculados, también llamados ajedrezados o mosaicos, sobretodo rodeando el altar y los sitios de reunión. También se aprecia en un sinnúmero de obras artísticas, siendo un patrón muy común dentro de la masonería y con un gran significado alegórico.
El piso con este diseño representa "dualidad" y "equilibrio", también tiene connotaciones herméticas, ya que esta dualidad equilibra todo lo existente; "blanco" y "negro" son un símbolo hermético del cuarto principio de polaridad. Esto encarna la verdad de que todas las cosas están universalmente reconciliadas. Espíritu y Materia son solo dos polos de un mismo elemento en diferentes grados de vibración, lo cual se encuentra en el tratado de "El Kybalion", que recopila las antiguas enseñanzas herméticas:
"Todo es dual, todo tiene polos; todo tiene su par de opuestos; los semejantes y desemejantes son los mismos; los opuestos son idénticos en naturaleza, difiriendo sólo en grado; los extremos se tocan; todas las verdades, son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse".
3. El Ojo de la providencia
También llamado "el ojo que todo lo ve". Este símbolo es súmamente famoso, principalmente por estar retratado en el dólar estadounidense. Esto se debe a que la mayor parte de los padres fundadores de Estados Unidos fueron masones, como George Washington, Thomas Jefferson o Benjamin Franklin, solo por nombrar algunos, además de otros personajes ilustres de la época.
En la masonería, el ojo de la providencia significa crecimiento potencial, iluminación y conocimiento. También está destinado a representar que las acciones de un masón nunca pasan desapercibidas: que ya sea en este mundo o en el próximo, nuestras acciones serán juzgadas por Aquel que lo ve todo. Esto se refiere al Gran Arquitecto del Universo. También sirve para recordarse a sí mismos que deben mantener sus estrictos estándares morales, junto con no imponer sus valores al público en general.
Sin embargo el origen de este símbolo se remonta a casi 4.000 años atrás en el Antiguo Egipto, en donde se le conocía como "El Ojo de Horus"; símbolo de divinidad interior, perfección y conocimiento ilimitado. La religión egipcia indica que Horus perdió sus ojos luchando contra Set, quien había usurpado el trono de su padre Osiris, luego de haberlo asesinado. Horus fue curado por Thot, el dios de la sabiduría, señor de la ciencia y de todos los saberes. Para devolverle la vista a Horus, Thot fabricó personalmente este ojo y se lo implantó en su rostro; esto le concedió a Horus el acceso a todos los secretos del universo. Esta es una alegoría esotérica que los egipcios crearon para retratar los poderes de la "glándula pineal", una pequeña estructura anatómica ubicada en la parte posterior del diencéfalo, la cual siempre ha sido asociada con la espiritualidad, la intuición, las habilidades extrasensoriales y la divinidad interna, incluso René Descartes milenios después diría que la pineal funciona como el "vehículo del alma". Si nos fijamos, el Ojo de Horus es en realidad una representación exacta de esta estructura anatómica, incluso las pestañas y las cejas forman parte del diencéfalo, así como el halcón de Horus:
Es por ello que el Ojo también aparece en el hinduismo y en el budismo, en donde se le conoce como "Chakra Ajna" o "Tercer Ojo".
Con el tiempo, este símbolo fue cristianizado y sincretizado por la iglesia católica para así poder suprimir todas aquellas religiones consideradas "paganas" o "herejes", ya que el ojo siempre fue un símbolo muy importante para diversas culturas no cristianas. Es así como próntamente la iglesia se autoadjudica este símbolo, al que obviamente le otorgaron otro significado, transformándose en el ojo del mismísimo dios judeocristiano, como recordatorio de que estaba observando todos nuestros actos y pensamientos. Es súmamente habitual poder encontrar este ojo en innumerables pinturas e iglesias cristianas, aunque nada tengan que ver con la masonería original.
Estos pilares siempre han estado presentes en la simbología masónica, y forman parte fundamental también de muchas estructuras y obras artísticas, casi siempre adornando la entrada a los lugares de culto y encuentro. Jaquin significa "establecer", y Boaz significa "fortalecer".
También se les llama "pilares gemelos".
Su significado es simbólico, y se debe a una antigua alegoría masónica que atribuye la construcción del templo de Salomón a un arquitecto llamado Hiram Abiff, un gran masón y constructor, quien era conocedor de muchos secretos. Según los antiguos rabinos y ocultistas, Salomón fue un iniciado de las escuelas de misterio, y el Templo que mandó a construir era en realidad una casa de iniciación que contenía una masa de emblemas paganos, filosóficos y fálicos (cosa que también se menciona en el antiguo testamento). Debido a ello es que la imagen de Salomón siempre ha estado vinculada con el esoterismo y el ocultismo, y si usted lleva tiempo estudiando estos temas es probable que reconozca los patrones. Se supone que Salomón debía ser un siervo fiel del dios Yahvé, al igual como lo fue su padre, el rey David. Sin embargo, esto no fue así, ya que la misma biblia describe que Salomón se alejó de Yahvé y de sus enseñanzas, y que muchas veces desobedeció sus mandatos. También se indica que incluso su templo albergaba estatuas de dioses "paganos" del Cercano Oriente como Moloch y Astarot, a quienes adoraba, y que mandó a construir un templo en honor al dios Quemos. No es extraño pensar que Salomón, de haber existido, haya sido un iniciado en las artes esotéricas más antiguas que el judaísmo. De allí que también provienen otros mitos relacionados con su imagen, como el "Grimorio del Rey Salomón", "La Mesa o Espejo del Rey Salomón", "El Anillo del Rey Salomón", entre otros.
Por lo tanto, es evidente que su figura simbólica tiene gran importancia e influencia para diversas corrientes ocultistas. Continuando con el relato, la alegoría masónica dice que Hiram Abiff diseñó dos grandes pilares simétricos en medio de la entrada del templo, como si éstos estuvieran protegiendo sus puertas y custodiando la entrada, además, reflejaban que el interior era un lugar de carácter sagrado. La alegoría narra que Hiram fue asesinado por otros masones en el afán de descubrir los secretos que éste guardaba, aunque nunca los reveló (esto también simboliza la fidelidad que los masones tienen que tener con sus enseñanzas y la certeza de la muerte). Su cuerpo fue enterrado en el templo, que de haber existido realmente, cosa que no se ha comprobado; habría de datarse alrededor del año 800 a.n.e.
Esotéricamente, los Pilares actúan como un portal a lo misterioso, a lo sagrado, por ello es que se edifican en lugares de culto y encuentro, de este modo, también permite que los iniciados en la masonería y otras corrientes sepan dónde reunirse.
Es por ello que el poeta y novelista francés, Victor Hugo, quien también era masón, dijese:
También llamado "Delantal del artesano". Este mandil es la representación física más esencial del compromiso de un hombre con el arte y la fraternidad masónica. Este delantal será su insignia personal que lo acompañará durante toda su vida, incluso, al fallecer, será parte de sus prendas funerarias o colocado encima del ataúd.
El delantal se compara con orgullo con las decoraciones más nobles de la antigua Roma y la Europa medieval.
El Mandil funciona como insignia de distinción fraterna, que cada Masón recibe al iniciarse en las ceremonias de primer grado. Generalmente, los Mandiles siempre llevan el color blanco, que representa la pureza e inocencia, por lo que aveces también se elaboran con piel de cordero. Este delantal acompañará al masón en cada paso de su progreso a través de los grados restantes, y sirve como un recordatorio interno y continuo de su compromiso con la fraternidad y la búsqueda de conocimiento.
Aquí abajo por ejemplo, podemos ver a George Washington y otros padres fundadores con el delantal del artesano, entre otros símbolos masónicos como los guantes blancos.
Los guantes masónicos se le entregan a los iniciados para que formen parte de su vestimenta habitual. Los guantes indican que todos los actos y pensamientos de un masón deben ser impecables y puros, tal cual como son los guantes blancos que se le han entregado. También indica que un masón debe mantenerse limpio de las tentaciones y toxinas del mundo exterior.
El águila bicéfala es el principal y más alto emblema del Rito Escocés.
Como símbolo, la imagen incorpora muchas capas de significado, aveces acompañada de otros elementos. El águila en sí siempre ha representado ideas tales como la nobleza, la libertad y la regencia. Las grandes alas son protectoras, mientras que las afiladas garras infligen castigo al mal. La noble cabeza blanca indica a un gobernante justo y aristocrático. La fuerza, el coraje, la previsión y la moralidad se han asocian a ella.
El registro más antiguo de su uso se remonta al año 3.000 a.n.e, en la ciudad sumeria de Lagash, y desde entonces ha pertenecido como emblema de diversas culturas y reinos.
Para el rito escocés, un masón vive bajo la protección simbólica del águila de doble cabeza. Ella extiende sus alas para darte vuelo, mira hacia atrás para ver dónde has estado y mira hacia adelante para ver a dónde vas. Eso ayuda a que cada masón sepa dónde se encuentra.
En la doctrina hermética alquímica en la que se basan muchos símbolos masónicos, el águila es un signo de Escorpio y es emblemático de la transformación: el escorpión humilde y reptante que se convierte en la criatura del aire. Alquímicamente, el águila era un símbolo de azufre purificado y se usaba en imágenes alquímicas para representar el espíritu ascendente. Las cabezas dobles suelen ser emblemáticas de la reconciliación de la materia y el espíritu. Otros elementos en el águila masónica refuerzan el simbolismo alquímico: una espada que representa el fuego celestial y la corona del logro espiritual (acompañada aveces del grado, en especial el 32 y 33).
Este símbolo apareció en la portada del destacado masón Albert Pike; "Morals and Dogma of the Ancient and Accepted Scottish Rite of Freemasonry", de 1871.
En la masonería, el ojo de la providencia significa crecimiento potencial, iluminación y conocimiento. También está destinado a representar que las acciones de un masón nunca pasan desapercibidas: que ya sea en este mundo o en el próximo, nuestras acciones serán juzgadas por Aquel que lo ve todo. Esto se refiere al Gran Arquitecto del Universo. También sirve para recordarse a sí mismos que deben mantener sus estrictos estándares morales, junto con no imponer sus valores al público en general.
Sin embargo el origen de este símbolo se remonta a casi 4.000 años atrás en el Antiguo Egipto, en donde se le conocía como "El Ojo de Horus"; símbolo de divinidad interior, perfección y conocimiento ilimitado. La religión egipcia indica que Horus perdió sus ojos luchando contra Set, quien había usurpado el trono de su padre Osiris, luego de haberlo asesinado. Horus fue curado por Thot, el dios de la sabiduría, señor de la ciencia y de todos los saberes. Para devolverle la vista a Horus, Thot fabricó personalmente este ojo y se lo implantó en su rostro; esto le concedió a Horus el acceso a todos los secretos del universo. Esta es una alegoría esotérica que los egipcios crearon para retratar los poderes de la "glándula pineal", una pequeña estructura anatómica ubicada en la parte posterior del diencéfalo, la cual siempre ha sido asociada con la espiritualidad, la intuición, las habilidades extrasensoriales y la divinidad interna, incluso René Descartes milenios después diría que la pineal funciona como el "vehículo del alma". Si nos fijamos, el Ojo de Horus es en realidad una representación exacta de esta estructura anatómica, incluso las pestañas y las cejas forman parte del diencéfalo, así como el halcón de Horus:
Es por ello que el Ojo también aparece en el hinduismo y en el budismo, en donde se le conoce como "Chakra Ajna" o "Tercer Ojo".
Con el tiempo, este símbolo fue cristianizado y sincretizado por la iglesia católica para así poder suprimir todas aquellas religiones consideradas "paganas" o "herejes", ya que el ojo siempre fue un símbolo muy importante para diversas culturas no cristianas. Es así como próntamente la iglesia se autoadjudica este símbolo, al que obviamente le otorgaron otro significado, transformándose en el ojo del mismísimo dios judeocristiano, como recordatorio de que estaba observando todos nuestros actos y pensamientos. Es súmamente habitual poder encontrar este ojo en innumerables pinturas e iglesias cristianas, aunque nada tengan que ver con la masonería original.
4. Los Pilares Jaquin y Boaz
Estos pilares siempre han estado presentes en la simbología masónica, y forman parte fundamental también de muchas estructuras y obras artísticas, casi siempre adornando la entrada a los lugares de culto y encuentro. Jaquin significa "establecer", y Boaz significa "fortalecer".
También se les llama "pilares gemelos".
Su significado es simbólico, y se debe a una antigua alegoría masónica que atribuye la construcción del templo de Salomón a un arquitecto llamado Hiram Abiff, un gran masón y constructor, quien era conocedor de muchos secretos. Según los antiguos rabinos y ocultistas, Salomón fue un iniciado de las escuelas de misterio, y el Templo que mandó a construir era en realidad una casa de iniciación que contenía una masa de emblemas paganos, filosóficos y fálicos (cosa que también se menciona en el antiguo testamento). Debido a ello es que la imagen de Salomón siempre ha estado vinculada con el esoterismo y el ocultismo, y si usted lleva tiempo estudiando estos temas es probable que reconozca los patrones. Se supone que Salomón debía ser un siervo fiel del dios Yahvé, al igual como lo fue su padre, el rey David. Sin embargo, esto no fue así, ya que la misma biblia describe que Salomón se alejó de Yahvé y de sus enseñanzas, y que muchas veces desobedeció sus mandatos. También se indica que incluso su templo albergaba estatuas de dioses "paganos" del Cercano Oriente como Moloch y Astarot, a quienes adoraba, y que mandó a construir un templo en honor al dios Quemos. No es extraño pensar que Salomón, de haber existido, haya sido un iniciado en las artes esotéricas más antiguas que el judaísmo. De allí que también provienen otros mitos relacionados con su imagen, como el "Grimorio del Rey Salomón", "La Mesa o Espejo del Rey Salomón", "El Anillo del Rey Salomón", entre otros.
Por lo tanto, es evidente que su figura simbólica tiene gran importancia e influencia para diversas corrientes ocultistas. Continuando con el relato, la alegoría masónica dice que Hiram Abiff diseñó dos grandes pilares simétricos en medio de la entrada del templo, como si éstos estuvieran protegiendo sus puertas y custodiando la entrada, además, reflejaban que el interior era un lugar de carácter sagrado. La alegoría narra que Hiram fue asesinado por otros masones en el afán de descubrir los secretos que éste guardaba, aunque nunca los reveló (esto también simboliza la fidelidad que los masones tienen que tener con sus enseñanzas y la certeza de la muerte). Su cuerpo fue enterrado en el templo, que de haber existido realmente, cosa que no se ha comprobado; habría de datarse alrededor del año 800 a.n.e.Esotéricamente, los Pilares actúan como un portal a lo misterioso, a lo sagrado, por ello es que se edifican en lugares de culto y encuentro, de este modo, también permite que los iniciados en la masonería y otras corrientes sepan dónde reunirse.
Es por ello que el poeta y novelista francés, Victor Hugo, quien también era masón, dijese:
"Desde la más remota antigüedad ... la raza humana ha empleado la arquitectura como su principal medio de escritura. A veces una entrada, un frente o incluso una iglesia entera presenta un significado simbólico totalmente ajeno a la religión, o incluso hostil a la Iglesia. Solo los iniciados pueden descifrar estos misteriosos 'libros'".
5. Mandil
También llamado "Delantal del artesano". Este mandil es la representación física más esencial del compromiso de un hombre con el arte y la fraternidad masónica. Este delantal será su insignia personal que lo acompañará durante toda su vida, incluso, al fallecer, será parte de sus prendas funerarias o colocado encima del ataúd.
El delantal se compara con orgullo con las decoraciones más nobles de la antigua Roma y la Europa medieval.
El Mandil funciona como insignia de distinción fraterna, que cada Masón recibe al iniciarse en las ceremonias de primer grado. Generalmente, los Mandiles siempre llevan el color blanco, que representa la pureza e inocencia, por lo que aveces también se elaboran con piel de cordero. Este delantal acompañará al masón en cada paso de su progreso a través de los grados restantes, y sirve como un recordatorio interno y continuo de su compromiso con la fraternidad y la búsqueda de conocimiento.
Aquí abajo por ejemplo, podemos ver a George Washington y otros padres fundadores con el delantal del artesano, entre otros símbolos masónicos como los guantes blancos.
6. Guantes Blancos
Los guantes masónicos se le entregan a los iniciados para que formen parte de su vestimenta habitual. Los guantes indican que todos los actos y pensamientos de un masón deben ser impecables y puros, tal cual como son los guantes blancos que se le han entregado. También indica que un masón debe mantenerse limpio de las tentaciones y toxinas del mundo exterior.
7. Águila Bicefala
El águila bicéfala es el principal y más alto emblema del Rito Escocés.
Como símbolo, la imagen incorpora muchas capas de significado, aveces acompañada de otros elementos. El águila en sí siempre ha representado ideas tales como la nobleza, la libertad y la regencia. Las grandes alas son protectoras, mientras que las afiladas garras infligen castigo al mal. La noble cabeza blanca indica a un gobernante justo y aristocrático. La fuerza, el coraje, la previsión y la moralidad se han asocian a ella.
El registro más antiguo de su uso se remonta al año 3.000 a.n.e, en la ciudad sumeria de Lagash, y desde entonces ha pertenecido como emblema de diversas culturas y reinos.
Para el rito escocés, un masón vive bajo la protección simbólica del águila de doble cabeza. Ella extiende sus alas para darte vuelo, mira hacia atrás para ver dónde has estado y mira hacia adelante para ver a dónde vas. Eso ayuda a que cada masón sepa dónde se encuentra.
En la doctrina hermética alquímica en la que se basan muchos símbolos masónicos, el águila es un signo de Escorpio y es emblemático de la transformación: el escorpión humilde y reptante que se convierte en la criatura del aire. Alquímicamente, el águila era un símbolo de azufre purificado y se usaba en imágenes alquímicas para representar el espíritu ascendente. Las cabezas dobles suelen ser emblemáticas de la reconciliación de la materia y el espíritu. Otros elementos en el águila masónica refuerzan el simbolismo alquímico: una espada que representa el fuego celestial y la corona del logro espiritual (acompañada aveces del grado, en especial el 32 y 33).
Este símbolo apareció en la portada del destacado masón Albert Pike; "Morals and Dogma of the Ancient and Accepted Scottish Rite of Freemasonry", de 1871.
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